Publicado: Martes, 21 Junio 2022

Valladolid – Malta: una conexión Ignaciana, gracias a Erasmus Plus

Agradecer, convivir, compartir. Tres verbos que definen con precisión la experiencia Erasmus Plus que dos profesores del colegio San José – Jesuitas de Valladolid han vivido en su visita al colegio St. Aloysius de Malta.

Esta visita forma parte de un proyecto del centro que aprovecha esta experiencia internacional para marcar tres objetivos: prevención del abandono escolar, el aprendizaje basado en proyectos y la mejora de la inclusión.

Durante cuatro días, no solo han visitado y conocido el proyecto de este colegio de la Compañía de Jesús en Malta. También han profundizado en unos objetivos basados en un lenguaje común de cualquier escuela jesuita: formar alumnos y alumnas conscientes, competentes, comprometidos y compasivos.

“Ha sido una oportunidad de sentirse en casa, de ver cómo se vive la espiritualidad ignaciana, cómo dos colegios tan lejanos, pueden estar tan unidos en lo esencial. Nos han acogido como a amigos, abriéndonos las puertas y ofreciéndonos todo su tiempo”, explica Marta Ganso, una de profesoras que ha tenido la suerte de participar en esta experiencia.

Acción local, misión compartida

Esta experiencia también ha servido para sensibilizar y ser un poco más conscientes de que en diferentes contextos la misión es la misma. Un colegio de Valladolid y otro de Balzan pueden tener sensibilidades similares, retos parecidos y líneas de trabajo convergentes. Este, por ejemplo, es el caso de la atención a las necesidades educativas especiales, ya que es el St. Ayloisius de Malta es una entidad referente de la integración en la educación y el San José de Valladolid lo es en la hipoacusia.

Otro de los aspectos trabajados ha sido la labor social y transformadora de las escuelas jesuitas, algo que va mucho más allá del aula y que abarca desde el cuidado de la Casa Común hasta la colaboración con otras entidades del ámbito social.

Este aspecto de la educación a través de la acción ha sido uno de los puntos de encuentro más interesantes para el profesorado del colegio San José, que ha podido conocer varias de las propuestas concretas de este centro maltés, como el proyecto ‘Ambassadors for change’ (En este enlace) o las tres acciones anuales de colaboración con otras organizaciones.

En definitiva, esta experiencia Erasmus Plus ha servido para continuar un camino de transformación educativa, social y global. El reto, una vez finalizada la visita, es tejer una nueva red de colaboración entre dos colegios que están separados por el Mediterráneo y 2.000

kilómetros de distancia, pero que comparten una misma identidad y una sola misión. En palabras de los docentes del St. Ayloisius: “Queremos proveer a nuestro alumnado de una educación más global para ayudarles a ser más conscientes de que formamos parte de un mismo mundo”.

El primer paso está dado, ahora toca hacer camino.

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