Se reabre el centro Javier de Huelva, al tomar SAFA el relevo de los jesuitas
En junio de 2020, la Compañía de Jesús cerraba su comunidad de jesuitas en Huelva. Antes de la partida, Kiko Naranjo sj planteó al equipo directivo del colegio SAFA Funcadia la posibilidad de seguir cuidando del Centro Javier de voluntariado, de las personas que lo conforman y de sus respectivas obras.
SAFA Funcadia dijo que sí y tomó con ilusión y orgullo el relevo de la gestión del Centro Javier para dar continuidad a esta labor humanitaria y a una de sus principales premisas: formar a personas completas, útiles para el mundo y con vocación de servicio. Y ha sido ahora, después de un duro trabajo, cuando el pasado 23 de marzo se celebró un acto que supuso su reinauguración. La Compañía de Jesús y Fundación SAFA hacían así oficial el traspaso de la gestión Centro Javier de Huelva, emblema del voluntariado joven en la ciudad desde 1969, en presencia de diferentes autoridades.
El acto estuvo presidido por el alcalde de Huelva, Gabriel Cruz, acompañado de Director General de las Fundaciones Safa y Loyola, Enrique Gómez Puig, sj y el Delegado de la plataforma Suroccidental Francisco Cuartero Valverde, sj, quienes compartieron la trayectoria histórica de los jesuitas en la ciudad. También estuvieron, entre otros, la delegada del Gobierno de la Junta de Andalucía en Huelva, Doña Bella Verano Domínguez; la subdelegada del Gobierno en Huelva, Manuela Parralo; el director Gerente del colegio Safa Funcadia, Agustín Guerrero Moreno, y el subdirector de Infantil y Primaria y responsable del Equipo de Dimensión Social del colegio, Luis Martínez del Hoyo Vázquez.
Los P. Francisco Cuartero Valverde sj y el P. Juan Francisco Naranjo Royo sj, recibieron en representación de la Compañía de Jesús una placa como símbolo del ‘traspaso de la gestión’, de manos de Voluntarios de la Red de Jóvenes y el alcalde; y los voluntarios de la Red de Jóvenes de SAFA Funcadia.
El Centro Javier 21, como así ha sido bautizado en su nueva andadura, mantiene vivas actividades en las que tienen cabida todos aquellos proyectos vinculados con la Fe, la Cultura y la Justicia que, históricamente, han dado sentido a tantas generaciones de jóvenes en Huelva. Del Hoyo apuntó que “es un lugar en el que se pueden acoger propuestas que contribuyan a esa necesidad tan grande que tiene nuestra sociedad de ser cuidada y atendida por todos. En este sentido, tanto las asociaciones usuarias del Centro Javier, como la escuela, tratamos de colaborar a través del voluntariado”.
Actualmente más de una docena de instituciones y organizaciones vinculadas al voluntariado y a la solidaridad desarrollan su actividad en en el centro, bajo tres áreas: el de fe-pastoral, en el que se encuentran los grupos de oración, la Asociación de Viudas, Acheesil o Fio (encuentros de familias y acompañamiento espiritual ignaciano); el de cultura, con grupos scout, catequesis (encuentros entre asociaciones, proyectos de colaboración, charlas y cursos de formación) y justicia, en el que está Entreculturas, Red de Jóvenes Solidarios, Economato Resurgir, Traperos de Emaús o ACCEM.
Seis grandes objetivos
En esta nueva etapa, la Fundación SAFA se ha establecido diferentes objetivos, como colaborar en el cuidado y la conservación del patrimonio arquitectónico que deja la Compañía de Jesús a su cargo; fomentar el uso de los espacios que hay en el Centro Javier trabajando con todas las asociaciones y entidades de voluntarios que, históricamente, han nacido allí y con los que se comparte misión; favorecer el desarrollo de nuevos proyectos que, aunque no sean propios de la Compañía de Jesús sí persigan logros de justicia social según el sentir y los modos de la espiritualidad ignaciana; garantizar la sostenibilidad del espacio mediante la gestión de proyectos que queden acogidos en los edificios y mediante la obtención de subvenciones; diversificar los espacios permitiendo al Colegio SAFA Funcadia disponer de nuevas aulas en las que se forme su alumnado; y favorecer el relevo generacional entre los voluntarios de los grandes proyectos pastoralistas y los jóvenes de la sociedad onubense y andaluza creando puentes y abriendo espacios de comunicación.
En definitiva, además de tener un espacio donde trabajar con jóvenes se pretende acercarlos a la realidad de las necesidades de la población onubense ubicando, alrededor de ellos, programas y proyectos solidarios que pueden conocer de primera persona. Así, se establece una conexión valiosa entre los voluntarios de tercera generación y la nueva generación de voluntarios con la que se trabaja actualmente.
(Fotografía: Huelva Información)