
Inauguración del curso en la Universidad de Deusto
La Universidad de Deusto ha inaugurado, el 14 de septiembre, el nuevo curso académico 2015-16. Y lo ha celebrado en Donostia, coincidiendo con el 50 aniversario del comienzo de impartición de clases en su campus donostiarra. Los estudios empresarias de la ESTE empezaron un poco antes, en 1956, en Brunet Enea (Ategorrieta) convirtiendo esta iniciativa en universidad pionera en Gipuzkoa.
Para el Rector, la cuestión de la fe es una cuestión importante en el posicionamiento que realiza una institución religiosa y también en el caso de cualquier otra institución relacionada con la cultura o con lo público, dada su dimensión pública.
Donostia será en 2016 capital europea de la cultura y la Universidad de Deusto, como centro universitario decano en la ciudad, quiere aportar su visión y, sobre todo, su ejemplo, en un continente con una riqueza y pluralidad cultural muy relevantes, donde lo religioso está presente en sus distintas formas. Y es que para Deusto, plantear correctamente la cuestión de la fe es parte importante del servicio público que el centro realiza, como entidad eclesial, en un contexto de pluralismo y secularización.
En relación con la pluralidad, la universidad la respeta y la asume empáticamente como expresión de un valor clave: la libertad. Como ejemplo, en los dos campus de Deusto, hay salas para meditación no cristiana y salas para oración musulmana. Respecto a la secularización, en el caso de Deusto se traduce en un claro reconocimiento hacia el hecho de que algunos alumnos, profesores o personal de servicio, trabajen por elementos de nuestra misión universitaria, aunque no sientan que brotan de la fe.
El Rector considera clave distinguir entre lo racional y lo razonable. Según su opinión, la opción religiosa puede ser razonable, pero no racional. En este contexto, un reto hoy en día para la fe es trabajar su “razonabilidad”. Y en concreto, en la universidad, hacer esto con unos y con otros, con creyentes y agnósticos, aprendiendo unos de otros. Buscar cómo explicar la fe en nuestro contexto cultural. “Es tarea de los cristianos hacerse entender en un mundo en el que triunfa la injusticia y lleva más a la desesperanza que a la esperanza”, ha indicado.
Otro de los retos que ha señalado y que afecta a la docencia, investigación y proyección social, es trabajar las cuestiones de sentido. Para José María Guibert, la Universidad, desde la pluralidad, ha de provocar experiencias y planteamientos que nos lleven a preguntarnos por el sentido de las cosas y avanzar en nuevas propuestas de solución a las grandes preguntas y problemas que afectan a la humanidad. “Buscamos, en este contexto fomentar el diálogo intercultural e interreligioso desde el compromiso y la responsabilidad social. Pero todavía estamos aprendiendo a realizar nuestra misión universitaria en un contexto secularizante”.
La Universidad de Deusto es probablemente, como entidad jurídica independiente, la institución religiosa más grande de Euskadi. En este sentido, el Rector cree que puede ser fuente de inspiración, de humanismo o de razonabilidad. Y para ello, se ha de mostrar, con hechos y con argumentos, que la opción fides humaniza a las personas y a la sociedad y que es una buena noticia para todos.
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