Publicado: Martes, 03 Marzo 2020

Sal Terrae: Minorías cristianas en Europa

El catolicismo europeo representa hoy menos de un cuarto del total de católicos del mundo. Somos minoría en la Iglesia. Pero ¿también en Europa? El Anuario Estadístico de la Iglesia 2017 dice: “en Europa, sin embargo, se manifiesta una situación estable (en 2015 los católicos eran casi 286 millones y son poco más de 800.000 en comparación con 2010 y 1,3 millones menos que en 2014). Este estancamiento se debe a la  notoria situación demográfica, cuya población ha aumentado ligeramente, mientras se prevé que disminuya drásticamente en los próximos años”. Además el abandono de la religión en la edad adulta es frecuente en Europa. Incluso el abandono de toda creencia religiosa ya es un hecho que afecta a más de la mitad de la población en algunos países. En muchos la mitad de los jóvenes ya no cree en Dios. En España sólo el 22% población acude a los servicios religiosos, al menos, una vez al mes. El abandono religioso de los educados en la fe cada vez es más temprano. Aunque en Europa el 92% fueron educados como cristianos en la actualidad sólo se consideran cristianos un 66%.

Este número de la revista SAL TERRAE intenta describir la situación y, al mismo tiempo, ayudar a reflexionar y ofrecer algunas ideas acerca de lo que los creyentes podemos hacer.

Javier Elzo Imaz ofrece, con la ayuda de dos acreditados organismos de investigación, el European Values Study y el Pew Research Center en su reciente estudio “Being Christian in Western Europa” la situación socio-religiosa de Europa Occidental, con especial incidencia sobre los que se posicionan como “no religiosos”, indiferentes, agnósticos y ateos.

Fernando Vidal reflexiona acerca de las causas por las que las minorías religiosas pueden resistirse a perder la fe en esta Europa secularizada y describe algunos caminos de resistencia de la fe.

Antonio Salas Ximelis valora cómo ha incidido la enseñanza de la asignatura de religión en la formación religiosa de quienes la han cursado. Quizá tengan algo que ver con el abandono temprano de la religión las vicisitudes de la enseñanza religiosa escolar.

Martin Maier, S.J. y José de Pablo, S.J., a la luz de los valores evangélicos de justicia, fraternidad y paz, desarrollan una breve teología de los signos de los tiempos para dar una visión de un nuevo proyecto de civilización y esperanza para el futuro del viejo continente.

Finalmente, dentro de la serie dedicada a los Díez Mandamientos Carlos Domínguez, S.J. expone cómo la imagen de Dios se presta a todo tipo de manipulaciones para hacer viable los sentimientos infantiles de omnipotencia: Dios manipulado mediante oraciones y rituales, encorsetado en esquemas de pensamiento, aliado de los poderes institucionales políticos o religiosos, utilizado como emblema del propio prestigio. Todo ello supone usar en vano del nombre de Dios.

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