Para discurrir, José María se queda al cargo
José María Arranz SJ se quedó de jefe. Estoy en La Palma, en la nueva sede de ECCA en la isla, disfrutando del equipo y su trabajo. Patricia y Ricardo son de nueva incorporación; Carlos, el delegado, está contento con el desafío: nuevo local y mucha renovación en el equipo. Conversamos delante de un café y una pulguita de “carne mechada con todo” que escurre un aceite que hace peligrar mi camisa. Me llega el wasap: “Ya estamos camino de Madrid”. Es Javier, que va para el encuentro de Centros Fe y Cultura. Al rato, en el wasap de la comunidad aparece una imagen con Juan Ramón Colera, Noelia González y Dolores (Pastoral San Ignacio de Loyola) y el ínclito Crisanto Eban Abeso Obono, ex canario en el exilio malagueño. Así que con Juanra y Javier en Madrid y conmigo camino del ferry de Fred Olsen para La Gomera, Arranz se quedó al cargo, de jefe, de mandamás. “¿Cómo estás?” (le wasapeo). “Ya pasó”, me dice. Se refiere al “trancazo” con el que lo dejé hace un par de días. “Tu hermano Fernando está muy bien”, me comenta. Es que Fernando anda discurriendo por este mundo archipielágico contando lo que sucede en el corazón verde de la Amazonía: charlas en Lanzarote, Gran Canaria y La Palma. “La Provincia” publica una entrevista larga a nuestro amazónico hermano: “En Amazonia se ve el lado más perverso del sistema capitalista”, titula La Provincia en página completa dedicada a una entrevista esperanzada. En La Gomera (en la foto la fachada de la Iglesia de la Villa de San Sebastían) me recibe Antonio Silva, el delegado insular de ECCA. El viernes, Consejo Asesor, con amplia participación de la sociedad civil. Antonio señala las dificultades laborales de las y los jóvenes sin titulación. También apunta a la situación de muchas personas que han llegado de Venezuela: sin formación, sin empleo, sin recursos. “Coincidimos en el análisis”, subraya Lucía Morales, delegada de Cruz Roja en La Gomera. Juan Ramos, responsable la Caritas insular, insiste: “O trabajamos juntos, en alianza, o no conseguiremos cambiar las cosas”. Tras la comida, con el equipo de ECCA, embarcamos hacia Tenerife y de allí a Gran Canaria. Todavía no ha desaparecido la costa de La Gomera y canta de nuevo el Wasap: “El domingo nos veremos en Casa Manresa con CVX Tenerife, con mucha ilusión a presentar un proyecto de Entreculturas”, es Alicia Aller, la delegada insular de Entreculturas -está ilusionada porque andan detrás de financiación para un proyecto en Etiopía-. Cuando llegamos a Agaete (en Gran Canaria), me espera mi hermano Antonio, que me lleva a casa. Cuando para el coche me veo a José María, que va llegando del encuentro con los Scouts; y al rato aparece Jorge Vázquez, de la comunidad de Portaceli, en Sevilla, que se ha pasado la semana dando Ejercicios a los sacerdotes en Los Lagares… Es domingo por la mañana, Javier Castillo acaba de compartir: “Ya en Gran Canaria después de dos días intensos en Madrid. Estoy muy cansado pero más consolado que cansado de modo que súper bien. Ahora espero volar a Tenerife para la asamblea de CVX”. Por cierto, todavía me pregunto cómo fue posible que Messi le hicera tres goles al Sevilla. Tengo que mirar luego dónde está mi pasaporte, que la semana que viene vamos para Senegal.
Lucas López SJ