Campo de trabajo de Nazaret (Alicante)

"Finalizada la selectividad, y tras el paso por Salou, algunos compañeros acogimos la invitación del Colegio del Salvador y del Centro Pignatelli para acudir al campo de trabajo de Nazaret (Alicante). 

Nazaret es un centro de los Jesuitas donde ofrecen un presente y un futuro mejor a los niños y niñas en situación de desamparo.

Por las mañanas hacíamos distintos voluntariados en la residencia de mayores Virgen del Remedio, el Centro San Rafael para personas discapacitadas psíquicas, el Centro Véritas para personas con VIH, y actividades de verano para los niños de Nazaret.

Yo tuve la oportunidad de poder ser voluntaria en el centro San Rafael! El primer día fui con un poco de miedo porque no sabía con lo que me iba a encontrar, y nunca había estado haciendo un voluntariado así, pero también tenía mucha ilusión y ganas de dar lo mejor de mí misma. En cuanto llegué el miedo se me fue rápidamente, estar allí es como estar en familia. Todas las personas del centro, tanto discapacitados como los trabajadores, te recibían siempre con una sonrisa. Día a día ibas aprendiendo de ellos, de su forma de ver la vida, de su positividad, esperanza y alegría. Me llenaron el alma de abrazos, besos y amor, me hicieron aprender lo que de verdad importa y su compañía me hacía sentir a Dios muy cerca.

Por la mañana, antes de desayunar hacíamos un momento de oración, cada día tenía un tema que a lo largo del día reflexionábamos. 

Por las tardes realizábamos actividades sobre los temas de la mañana, cantar con la guitarra, jugar, guerras de globos, ir a la playa, rezar, misas, muchos partidos de fútbol y baloncesto, hacer juntos las comidas y disfrutarlas en tan buena compañía, preparar el festival para la residencia... Poco a poco nos fuimos haciendo una piña.

Después de cenar hacíamos el círculo Magis, donde realizábamos un examen ignaciano, en este círculo buscábamos y encontrábamos a Dios en las personas y momentos de ese día, después lo compartíamos con nuestros compañeros.

Ahora, ya a la vuelta me siento muy agradecida a Dios de haber puesto esta experiencia y estas personas en mi vida. Agradecida a David Abad SJ, Claudia, Ángela y Nacho por ser ejemplo de dar sin medida y de confianza en Dios. 
Y agradecida a todos mis amigos; Victoria, Laura, Carmen P, Mónica, María, Rocío, Lucía, Alicia, Ana, Cristina, Álvaro, Pedro y Javier por vuestras ganas de divertiros y de servir a los demás!Para finalizar me quedo con la idea de que el voluntariado es como un ocho; das pero también recibes. En Nazaret he recibido por multiplicado!"

Carmen Navarro Leach (Zaragoza)